Seguimos nombrando accesorios y extras que pueden instalarse en nuestro láser de corte y grabación. [continuación del post https://laseraficionado.blogspot.com/2020/05/componentes-y-accesorios-de-un-laser.html]
- - La “cama”. El soporte que la máquina incluye donde apoyar el material no es nada bueno: difunde mal el calor, provoca mala circulación del aire, etc. Es habitual que la cama donde reposa el material se cambie por una con malla de “panal de abeja” (honeycomb) y, ya puestos, ajustable en altura, para poder ajustar el foco del láser en el punto del material que nosotros queramos. Este “extra” no es fácil de hacer ni ajustar, pero ofrece muy buenos resultados. Además, permite que podamos hacer un cambio rápido a un “rotador o rotatorio”, un soporte giratorio para grabar en elementos cilíndricos. Estos añadidos no son baratos ni fáciles de ajustar bien.
- Y entre los accesorios menos comentados, que añaden detalles pero no tan relevantes están:
- - Luces leds, para que se vea mejor el trabajo que se está haciendo mientras está la cubierta cerrada. Algunas máquinas incluyen una tira pero es insuficiente para algunos.
- - Un filtro EMI. Si notas que la máquina te produce interferencias con la tele o la radio, o incluso cuando estás enviando datos desde el ordenador, un filtro de emisiones electro-magnéticas puede resolver el problema por poco dinero.
- - Más ventiladores. Tanto sea en la zona de la fuente y controladora, como en la caja del láser, a veces, es interesante aumentar el flujo de aire y dirigirlo.
- - Para todo lo que no sea el láser y la controladora, no uses la fuente principal. Si pones extras que consuman electricidad, por poco dinero puedes añadir una fuente extra que dé el voltaje y potencia que necesitas sin abusar de la fuente principal.
- - Unas gafas de protección a las radiaciones láser. Muy interesantes pero ten en cuenta que sean útiles de verdad y no solo postureo: tienen que proteger contra láseres ultravioletas (en la gama de los 10600nm) y a un nivel OD5 o superior (od5+, od6+, od7).
- - Una mesa auxiliar donde “empaquetar” todos los componentes, y con ruedas. Es más útil que esas pequeñas ruedecillas que vienen con algunas máquinas y que no ayudan a evitar vibraciones. La foto es solo orientativa.
- - Un extintor de CO2. Algo que espero que nunca llegues a usar pero que te puede librar de algún susto. No está de más.
- Un estabilizador de corriente (SAI o UPS). Si tienes problemas de estabilidad en la corriente porque tengas muchos aparatos conectados o alguna máquina de gran potencia, es interesante conectar un estabilizador de corriente en la entrada principal que amortigüe los picos de corriente y te mantenga sano el tubo de gas.
Extras menos usados
y no siempre interesantes:
- - Filtro para el aire expulsado: si la salida de aire va hacia una zona común o tienes vecinos que puedan verse afectados, algunas veces puede ser interesante añadir un filtro de carbón o similar a la salida de la tobera: reducirá el ruido y la proporción de contaminantes, aunque no tanto los olores y algunos humos. Ten la precaución de poner un extractor potente si el filtro es muy denso.
- - Lámpara ultravioleta o UVC para el agua del depósito. A pesar de tener el depósito cerrado al aire y opaco al sol, el agua se contamina. Con este by-pass (muy usado en acuarios) se consigue eliminar la aparición de hongos y verdín. Si la tienes, úsala; pero si no la tienes, piensa que tampoco pasa nada por cambiar el agua y limpiar el depósito cada cierto tiempo.
Termino ya (lo
prometo) con un repaso rápido de los repuestos más comunes:
- - El tubo de láser CO2 en sí. Cuando llegue el final del que tienes, puedes cambiarlo por uno nuevo para seguir disfrutando de la diversión. El tema de cambiarlo por alguno más potente no es tan sencillo como cambiar uno por otro. Influye la potencia de la fuente y el rango de trabajo de la controladora.
- - El cabezal, la lente o los espejos. Con el humo y los gases, los soportes y los cristales se resienten. Si, además, el rayo no está bien ajustado, alguno se puede quebrar. Hay varios modelos en el mercado, de diferentes materiales y tamaños. O cambias al mismo modelo que tienes, o tendrás que ajustar toda la máquina.
- La fuente de potencia. Es el corazón eléctrico de la máquina y también se agota. Como mínimo, hay tres modelos en el mercado. También es cambiar una por otra, del mismo modelo.
- - La controladora. Pocas máquinas quedan ya con la antigua controladora Moshi (que necesitaba de un software especial). Ahora la mayoría usan la M2nano. También hay controladoras GBRL con Arduino, la Cohesión 3D y, la que ahora es la más avanzada, la Ruida (modelos 6442 y 6445). Esta última permite trabajar independientemente del ordenador, además de añadir funciones extras, facilitar el trabajo por capas y aceptar trabajar con RdWorks.
Conclusión: Las máquinas láser tipo k40 no son “impresoras de conectar y punto”, son máquinas que requieren de una instalación, un mantenimiento y que carecen de muchos detalles para conseguir un precio bajo de entrada. Si la cuidas bien, puede darte muchas alegrías.
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